Casi siempre parece que todo es eterno, que no se acaba.
En este momento donde vivimos encerrados entre la cara y el celular, con miedo a un virus mortal que ya demostró que es fuerte y cierto, tenemos que ser más astutos y entender rápidamente que esto es pasajero, que cada minuto vale lo que el cristal más preciado y que la vida es una sola.
Si existe o no la reencarnación hay que vivir la vida, despertar y agradecer todo. Manteniendo los valores en alto, la lealtad ante todo y dejar la pereza de lado.
Sigueme en Instagram
andres.vancook
Comentarios