Parece mentira que en #México, uno de los países más peligrosos del mundo para las mujeres, hace un año atrás estábamos a punto de un gran cambio, una revolución donde las mujeres estaban levantando la voz como nunca antes en la historia hasta que llegó la pandemia. Todo se silenció de nuevo, PERO LA VIOLENCIA CRECIÓ COMO NUNCA ANTES.
Más muertes, más feminicidios y el foco de la charla sobre esto se desviaron en muchos otros temas, los cuales también son importantes, pero no son el tema de violencia contra la mujer.
Es mucho, ya es mucho, una mezcla de todo donde el único culpable es el hombre y la mala cultura que arrastramos desde aquellos años patriarcales, en los cuales se grabaron en piedra pensamientos estúpidos. Aun hoy en día muchos siguen pensando que son más, superiores, ignorantes del sentido común y con mente de corto plazo, PORQUE TODOS TENEMOS UNA MADRE. Venimos de una mujer, aunque muchos no lo entienden. Ojala la próxima vacuna sea contra la estupidez de aquellos hombres que siguen ciegos y esos padres que educan de manera tan cavernícola a sus hijos. Un niño mal educado y falto de igualdad entre hombres y mujeres es un PROBLEMA FUTURO. Educa bien a tus hijos carajo, sino ni los tengas. Ahí es la cuna de los traumas y confusiones de millones de hombres equivocados que actúan como locos, como psicópatas, a los cuales solos vemos en las noticias después de haber cometido asesinatos iguales a los que se ven en las peores películas de terror. ESTAMOS EN EL PEOR MOMENTO DE LA HISTORIA…
Mujer, no fuiste tú, niña, NO ERES TÚ la culpable de las miradas perversas, de los comentarios intimidantes, del miedo que sientes por ese ser inmundo que se te acerca, te persigue en la noche, que busca incomodarte, acosarte en el trabajo, en casa cuando quedas sola, porque quedas sola por error, por confianza mal invertida por aquellos que deberían cuidarte. No es como te vistes.
NO ERES TÚ, es ÉL.
Tú puedes ser como quieras, vestirte como quieras. El que te acosa, el que te acosó tiene miedo. Es inferior mentalmente y con muchísimas inseguridades, complejos de inseguridades que les metieron sus padres o la ausencia de ellos. Ese hombre merece castigo, merece ser expuesto y merece estar controlado por otros si tú no puedes hacerlo. Merece cárcel o castigo divino pero no menos. Ese hombre o esos hombres son cobardes, tienen miedo, su arma psicológica es intimidarte y llevarte a un lugar donde los veas como MONSTRUOS PODEROSOS, metiéndote miedos, amenazas, agresivos, con voces fuertes pero susurrantes.
Tiene miedo, y es preferible enfrentar las consecuencias de levantar la voz, como sea, pide ayuda, porque es preferible a la muerte. Si puedes escapar del dolor que se siente. Es increíble que aún existen comunidades que solapan esto, donde las madres de los violadores siguen diciéndoles "mijitos", justificándo todo y hasta diciendo que las victimas provocaron a "sus ángeles" malditos. Esos lugares también son focos de contaminación que hay que ir vacunando.
NI UNA MENOS. Trabajemos con hombres, padres, amigos, conocidos. CAMBIEMOS ESTO. Recuerda, NO FUISTE TÚ.
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